A primera vista, contratar a un consultor remoto para ayudar a tu organización puede parecer una decisión fácil. Después de todo, ¿por qué pagar a un empleado a tiempo completo cuando puedes obtener los mismos servicios de un contratista sin tener que cubrir gastos generales ni prestaciones? Pero, ¿está tu empresa realmente preparada para un consultor a distancia? He aquí algunos factores que debes considerar antes de dar el salto.
Antes de decidir si tu empresa está preparada o no para un consultor remoto, es importante tener en cuenta la tecnología necesaria y la infraestructura asociada. ¿Dispones de sistemas fiables, como soluciones seguras de almacenamiento en la nube y software de videoconferencia? ¿Hay herramientas instaladas en estaciones de trabajo y ordenadores portátiles que den acceso a la información a distancia? ¿Qué tipo de red hay disponible para garantizar un rendimiento óptimo? Todas estas son preguntas que hay que responder antes de decidir si tu empresa está preparada para la consultoría a distancia.
Lo siguiente que hay que tener en cuenta es la cultura y el entorno de la empresa. ¿Está tu organización abierta a nuevas ideas y personas? ¿Tienes un sistema establecido de comunicación entre departamentos, o los miembros del equipo tienden a trabajar de forma independiente sin mucha colaboración? ¿Comprende tu personal lo importante que es permanecer conectado aunque trabajes a distancia? Establecer una relación sólida con un consultor a distancia requiere confianza, respeto y una comunicación abierta.
¿Tengo lo necesario?
Aunque la tecnología y la infraestructura estén en su sitio, y la cultura empresarial sea propicia para el trabajo a distancia, puede que haya otros factores que impidan a tu empresa contratar a un consultor con éxito. Por ejemplo, ¿cómo de preparado está tu equipo para asumir la carga de trabajo y manejar el aumento de responsabilidades? ¿Dispones de suficientes recursos de gestión de proyectos para garantizar que todos rindan cuentas de su trabajo? ¿Qué tipo de formación o incorporación necesitarán los nuevos miembros del personal antes de estar preparados para empezar a trabajar?
Por último, es importante considerar cuánto tiempo y dinero estás dispuesto a invertir en establecer una relación satisfactoria con un consultor a distancia. ¿Hay costes iniciales asociados a la creación de la infraestructura necesaria para el trabajo a distancia? ¿Podrás ofrecer una remuneración económica y unos paquetes de prestaciones acordes con los estándares del sector para profesionales experimentados en este campo?
Conclusión
Contratar a un consultor remoto puede ser una opción excelente en función de los objetivos de tu organización y recursos, pero es importante dedicar tiempo a considerar detenidamente los factores antes mencionados. Con un poco de preparación y planificación, puedes asegurarte de que cualquier consultor a distancia que contrates tendrá éxito a la hora de ayudar a tu empresa a alcanzar sus objetivos.
En última instancia, que tu organización esté preparada o no para un consultor remoto depende de varios factores. Tu infraestructura tecnológica debe ser segura y fiable; tu equipo debe tener una cultura de colaboración establecida; y deben existir políticas de gestión de proyectos para que todos rindan cuentas. Tras evaluar estos componentes de tu empresa, tendrás una idea más clara de si contratar o no a un consultor remoto es adecuado para ti. Así que sopesa los pros y los contras antes de tomar la gran decisión.
